Animal Farm (1954, Joy Batchelor): una animación anarquista
Película de animación de culto dirigida por Joy Batchelor, basada en la novela homónima de George Orwell. Puntuación: 7/10.
Animal Farm o Rebelión en la granja es una de las novelas más célebres de George Orwell. Pese a que fue planteada originalmente como una dura crítica al régimen de Stalin en la URSS, en realidad puede interpretarse como una dura representación de lo que suele traer un régimen dictatorial en general.
He leído la novelette, he visto la película y aquí hablaré sobre la adaptación en celuloide. ¿Es buena? ¿Es fiel a la novela?
Entremos en materia.
Reseña
En términos históricos, ‘Animal Farm‘ (1954) es una animación inusual, ya que aborda un tema dirigido a un público adulto en un formato de animación idéntico a Tom y Jerry y los Looney Toons.
Pero, guardando las distancias, Rebelión en la granja puede ser disfrutada por todo tipo de públicos, pues la historia es sencilla, lineal y entretenida.
Su mensaje sociopolítico es imprescindible, y en cuanto a animación es visualmente hermosa y divertida. Y aunque no sea un criterio para evaluar una película, se agradece que la adaptación de la novela se hiciera sin muchas modificaciones de por medio.
El pesimismo de Orwell condena siempre el capitalismo, pero enfatiza la posterior decadencia de su presunta —y otrora— alternativa: el comunismo. Así, al final, sólo vislumbra un profundo desprecio por la acumulación de poder. Esta adaptación animada conserva tal espíritu, dándonos un guión a la altura del célebre escritor.
Todo lo que representa Rebelión en la Granja
Igual que en la novelette «paródica» —todo es (casi) igual en la vida real— de Orwell, nuestra historia empieza a desarrollarse con el cerdito mayor, el más viejo, (y se supone, sabio) de los cerdos, que da una charla acerca de su fantasía de una revolución a todos los animales de la granja.
Esto podríamos interpretarlo como una clara referencia a idealistas del comunismo como Karl Marx o más que nada, Lenin; quien, como sabemos, fue el líder de la Revolución Rusa y el marxismo-leninismo.
De igual modo podemos verlo muy similar a los discursos de diversos populistas tanto de derecha e izquierda, ya que a estas alturas la brecha entre los extremos es sosa.
La cuestión es que el cerdo despierta emociones de esperanzas e ira en sus espectadores ingenuos e ignorantes, para así despertar la violenta liberación de un sistema opresor que luego será sustituido por uno peor.
¿Te suena familiar? Es historia de Venezuela, Cuba, Rumania, etc. ¡Nunca confíes en los populistas!
Luego de su discurso los animales cantan un himno y en pleno acto de un intento fallido de cantar, el cerdo mayor muere frente a todos sus compañeros.
Ellos lloran y lloran, pero luego se callan por las amenazas a distancia del propietario de la granja animal. Todo esto pasa en los primeros minutos del metraje y nos prepara para lo que viene.
Los inocentes pagan
Tras un pequeño período de tiempo los animales se rebelan y la Revolución Roja es todo un éxito. Los animales tienen mucha autonomía, comida e incluso más tiempo libre. Pero por dentro todo empieza a desmoronarse en diminutas piezas que, al principio, pocos o nadie notan. Los cerdos se vuelven avariciosos.
Por ejemplo, Napoleón (¿Maduro? ¿Ceauscescu?) comienza a entrenar cachorros para que sean sus futuros guardianes.
A lo largo de toda la película —e igual en la novela— muchos son los inocentes que pagan, sea ya por rebelarse (las gallinas son robadas por los cerdos, algo que nunca sucedería en el hipotético gobierno commie que ideó el cerdo mayor) o razones indirectas como el hambre y excesivo trabajo.
Si te gusta, ve/lee 1984
Si no eres de ver dibujos animados, puedes optar por la película ‘1984‘, la otra gran obra de Orwell. Se sigue la misma dinámica de la anterior, criticando/parodiando los regímenes opresores. Hay dos versiones, incluyendo una de los ochenta protagonizada por John Hurt.
Recomiendo muchísimo ‘1984‘, entender su contexto histórico y darle un pequeño vistazo aunque sea a la película porque la historia atrapa desde el primer momento.
El final: (spoilers y reflexión)
Todo tiene su límite aunque éste parezca infinito a la vista. Recordemos que la Unión Soviética casi duró 100 años.
En la película los animales se rebelan contra los cerdos (vestidos ya como humanos y siendo peores que éstos) porque no soportan la miseria de sus condiciones de vida y el descaro del cinismo de los cochinos. Ahí acaba nuestra animación y empieza otra revolución, quién sabe con qué resultados.
La historia da para reflexionar mucho sobre el abuso del poder y cuestiones afines, desde luego. Cuestiona incoherencias como la supuesta «independencia» que depende de otros, la propaganda y manipulación de las masas, como también los miles de inocentes que se llevan consigo esta promesa vacía de salvación. A veces incluso hasta a los que están apoyándolo, como el cerdito llamado “Bola De Nieve“.
La acumulación de poder siempre ha sido un lastre.