The Lovely Bones (2009): por qué es necesario verla para comprender el feminicidio
Esta película quema, pero es necesaria.

The Lovely Bones es una película muy rara.
Lo es porque es fantasía, thriller y crimen al mismo tiempo. Y en la práctica es como un largometraje de terror feminista, con escenas que… Para ser PG-13, son demasiado.
No porque sea explícito o algo por el estilo, sino por las implicaciones de lo retratado.
Visualmente es preciosa, pero la historia de fondo es terror, horror del que puede comprender casi cualquier mujer. Es un drama terrible. Y quizá eso sea el punto más fuerte de The Lovely Bones, dirigida por Peter Jackson y adaptación soft de la novela homónima de Alice Sebold. Que lo que cuenta es real y siempre pasa y seguirá pasando.
La historia y su planteamiento es sencillo, pero contundente: una niña que es violada y asesinada por un vecino al que le tenía confianza. Ella llega a un cielo personal donde ve a la distancia la vida terrenal de sus seres queridos, y cómo ellos intentan obtener justicia y procesar el duelo.
Es una de mis películas favoritas recientemente, y en definitiva no es una historia para alegrarse, es un viaje de frustración, rabia y dolor.
La fantasía del cielo personal es al final una manera de retratar de una forma realista y cruda lo que deja detrás un feminicidio o un infanticidio por igual.
Las actuaciones, estupendas, sobre todo las de Stanley Tucci, Saoirse Ronan y Mark Wahlberg. En ese orden.
Rachel Weisz y Susan Sarandon hacen un trabajo menos relevante, pero apreciable.

La banda sonora a cargo de Brian Eno es estupenda. Guión y fotografía, bien hechas. Nunca comprenderé las malas reseñas a este largometraje, quizá porque algunos lo ven cursi y lo que se cuenta les es lejano, como si fuera solo fantasía.
Quizá lo que más me ha marcado es el final, que retrata lo que viene a ser el final de un duelo. No vale la pena contarlo, mejor verlo. Obviamente recomiendo muchísimo The Lovely Bones, pero comprendo que no será el mejor trago para algunas.